Tengo muchas cosas en la cabeza y la cabeza muy gorda pero con poco sitio. Será un quiste o que la tengo llena de payasadas. No importa. El caso es que encontré este vídeo no sé muy bien donde y casi cometo el error de olvidarlo. Viva san Google. Cuenta la historia de mi vida y como la mía de otros mil millones.
Pero lo cojonudo es que además de disfrutar cada uno de los once minutos del vídeo, viene de serie con una melodía que se mete en la cabeza y que me pone los pelos de la espalda tiesos como para colgar abrigos de pana mojados.
Hay muchas versiones del vídeo, así que dejo el link para la que estando doblada al cristiano, tiene mejor imagen. Ponedlo a pantalla completa y pinchad en HQ para verlo en alta calidad. Lo que pasa es que no sé por qué lo han cortado en dos. Algún defecto tenía que haber.
Esto es
la primera parte. Y esto
la segunda.
Y la música tambien me la ha buscado san Google. Es "
Blow your mind" de un señor llamado Thomas Haardell. 4 minutos de flotar. 12 si la escuchais tres veces. Me va a pasar como con
Alicia, que se me van las horas escuchándo la misma melodía.
mmmm, he vuelto... ha sido una época dura y rara...
sólo he vuelto a los comentarios, el blog sigue sin actividad por ahora...
this is the way girls are...
Holaaaaa que alegría, cuanto tiempo sin saber de ti. Me alegro de que vuelvas aunque sea pa saludar. Un beso.
Da gusto entrar en tu blog y pasármelo pipa leyendo y viendo-escuchando lo que propones.
Me ha encantado el corto. Estos suecos son muy ingeniosos ellos.
Gracias.
Engancha, engancha... Lo he vuelto a ver otra vez y rectifico: ¡Estos daneses son la leche y el café de listos!
Besos de nuevo
impresionante el video del "hombrecillo" me encanta el final..........y la musica.
Ya sabía yo que le iba a gustar esto a tol mundo. Gracias por la visita.
Interesante corto. La vida misma D. Alberto.
Aunque no pueda decirse en un 100%, nosotras somos así. Cuando llegáis, hemos ido y vuelto. ;)
Cada día me doy cuenta que sé menos de las mujeres. Me gustaría pensar que así tengo más cosas que descubrir pero tampoco estaría mal partir de una base firme. Tomaré como referencia de base que las mujeres no tienen colita. Al menos las que me gustan a mí.